Poza Rica, Ver.- La tradición de llevar a la bendición a los niños el día de la Virgen de Guadalupe continúa vigente, en Poza Rica desde hace un par de días vendedores que vienen de distintos puntos contribuyen con este festejo.
Los precios son bajos, hay trajes bordados a mano y con máquina, explica Elena, quien viaja desde Acaxochitlán, Hidalgo, hasta esta ciudad para vender durante estos días de fervor guadalupano.
Los vendedores suelen rentar algún cuarto modesto para que les pueda resultar factible pasar los días, y sobre todo las noches frías, y poder obtener alguna ganancia al retornar a sus lugares de origen.
Hemos encontrado amigos que nos apoyan, la gente es muy amable, comenta un vendedor, que cada año viene a esta ciudad a ofertar sus productos.
Por la tarde, las peregrinaciones convirtieron un caos la ciudad, había carriles saturados, y el fervor guadalupano era latente, mucha pirotecnia y cánticos a la Virgen del Tepeyac, acompañados de gritos a la emperatriz de América.
La parroquia de La Lupita es la más atiborrada en estas fechas, pero también en otras parroquias se llevan a cabo bendiciones de niños cada hora, y se realizan celebraciones eucarísticas en distintos horarios, para honrar la fiesta en honor a la Morenita.