Los más de 3,500 taxis que hay en la ciudad hacen difícil la vida para los choferes quienes tienen que trabajar el doble y a veces solo para el patrón, la gasolina y otros gastos, porque si bien les va no logran más de 200 pesos.
Aunado a esta situación los taxistas también se quejan de que las placas han sido acaparadas por petroleros, médicos, maestros, ingenieros o personas con poder adquisitivo, que al no ser sensibles ante esta crisis lo único que les interesa es el gasto diario, que va de los 250 a 500 pesos.
En este sentido los taxista hacen un llamado a las autoridades competentes para que tomen cartas en el asunto ,para que por lo menos ya no otorguen ninguna concesión para este 2017.
Texto POR ÁNGEL SCAGNO CASTILLO
FOTO ENRIQUE GONZÁLEZ MORALES