ÁLAMO, VER.- Deteriorados por el constante paso de vehículos, las rejillas de varios tragatormentas y tapas de registros del sistema público de alcantarillado, se encuentran hundidas en diferentes puntos de la ciudad, lo que significa un constante peligro tanto para automovilistas como para peatones.
Esta situación ha sido reconocida por el propio departamento de Servicios Públicos del Ayuntamiento, el cual ha señalado que todos los días le llegan reportes ciudadanos sobre dicho tema.
En este escenario, es de reconocer que, aunado a este problema, la enorme cantidad de hundimientos de pavimento en muchas partes citadinas derivó recientemente en la inconformidad de algunos ciudadanos, al grado que grupos de personas se avocaron -con recursos presuntamente propios- a bachear los puntos más afectados.
De acuerdo al mismo departamento de Servicios Públicos, el gobierno municipal está consciente de esta problemática por lo que pronto podría iniciar un programa de rehabilitación integral; sin embargo, la temporada de lluvias podría complicar todo y los hundimientos podrían tornarse aún más peligrosos para la ciudadanía.
Mientras tanto, sólo queda recomendar a transeúntes y automovilistas andar con cuidado en los puntos donde se ubican dichas trampas, para prevenir accidentes lamentables.