Rastro de Poza Rica es el único que sacrifica res, cerdo y pollo

De acuerdo con registros, el año pasado la matanza de res en el Rastro Municipal, estuvo muy baja y el mes con mayor actividad fue diciembre cuando se mataban de 20 a 24 reses por semana, pero desde que se inauguró la cámara fría en febrero de este 2022, se están sacrificando de 20 a 22 al día, lo que representa ingresos para el ayuntamiento, declaró el administrador Arturo Huidobro Salas, quien resaltó que es el único que maquila res, cerdo y pollo.

Debido a que hay clandestinaje de matanza de pollo, dijo que el ayuntamiento solicita incrementar esta actividad en el rastro, con la finalidad de prevenir enfermedades por el consumo de carne sin la revisión sanitaria.

Este rastro, agregó, cuenta con un médico veterinario para revisión de la carne de cada especie y cuando se detecta producto no apto, ya no sale a la venta, y tanto la res, cerdo o pollo que sale a los mercados, la carne ya lleva el sello sanitario para seguridad del público consumidor.

En el primer trimestre de este año, hemos detectado un 40 por ciento de hígados de res con fasciola, 10 por ciento de pulmones por abscesos y parasitosis y 10 por ciento por dermatitis, y todo se decomisa, se incinera y ya no llega a la mesa de las familias.

Por eso se busca incrementar la matanza de pollo para que el médico veterinario determine que no presenta alguna enfermedad y pueda ser consumido.

En el caso del cerdo, es el que más se consume pues en enero se sacrificaron 5 mil 306, en febrero 5913, en marzo 6 mil 548 y va en aumento y hasta ahora, no se ha detectado cisticercos en este producto.

En aves en el mes de enero se sacrificaron 22 mil 666, en febrero 21 mil 181 y en marzo se elevó a 27 mil 673 sacrificios.

Por otra parte, Huidobro Salas destacó que al inicio de la actual administración, se aplican medidas sanitarias para mantener limpias las áreas de este centro de matanza, desde mantenimiento semanal en los drenajes para evitar azolvamientos, y esto evita la presencia de animales de carroña o zopilotes.

Por Roberto Aguilar Tolentino