Tihuatlán, Ver.- Habitantes del ejido Buena Vista se inconformaron contra el alcalde Raúl Hernández Gallardo, quien en su campaña prometió que las obras no tendrían costo para el pueblo, sin embargo ahora no solamente las encarece, sino que exige que los beneficiarios, en su mayoría familias de muy escasos recursos, cubran el 10 por ciento.
Con cartulinas en mano, los inconformes señalaron que en la comunidad existen muchas necesidades, y recordaron que cuando Raúl Hernández era candidato acudió para pedirles el voto y a cambio les prometió muchos beneficios, pero ahora pretende cobrarles más de 600 pesos por familia para hacerles alguna obra.
“En otros años las obras nos las daba el gobierno pero ahora nuestro presidente municipal quiere que paguemos 634 pesos, lo que no podemos, porque la mayoría vivimos al día, unos ya ni podemos trabajar por nuestra edad”, refirió uno de los habitantes.
Agregaron que la comunidad ha solicitado la construcción de un domo y la pavimentación de una calle, aunque existen muchas otras necesidades que le fueron planteadas a Raúl Hernández Gallardo cuando fue a pedir el voto, respondiendo que tendrían obras sin costo alguno.
Dijeron que la comunidad de Buena Vista tiene unos 800 habitantes, la mayoría campesinos y muchos otros sin empleo, por lo que pidieron que se considere la cantidad que les exige el alcalde.
“Estamos dispuestos a cooperar, pero una cantidad razonable, podemos aportar 200 pesos por familia para la calle pavimentada y el domo, necesitamos el bienestar para las familias, que nos considere porque a veces no tenemos trabajo”, recalcaron.
Aclararon que la protesta fue pacífica, pero de no obtener una respuesta satisfactoria realizarán un plantón frente al palacio municipal, guardando siempre el orden y el respeto.
Insistieron que el llamado es para que el alcalde cumpla sus promesas de campaña, cuando dijo que apoyaría a las familias de Buenas Vista, una de las más olvidadas entre las 84 comunidades del municipio.