Tuxpan, Ver.- Las empresas de transporte urbano que operan en Tuxpan, trabajan en números rojos por el incremento del diésel. Esta situación no tan solo afecta a los empresarios del ramo, sino también las familias que dependen de esta fuente de trabajo.
De acuerdo a lo señalado por Alfredo Dam Ham, delegado de la Alianza Mexicana de Organizaciones de Transportistas, el transporte urbano está a un paso de la quiebra, teniendo que sacar hasta cinco unidades por empresa de circulación.
El aumento del combustible ha impactado un 30 por ciento en los ingresos de las empresas y a esto se suma otro gran porcentaje de la nómina de los trabajadores y mantenimiento de las unidades. “No hay ganancias”, explicó.
Independientemente del alza de los hidrocarburos, el mantener las unidades es muy costoso, porque deben comprar las piezas con el tipo de cambio vigente, por lo que, los costos de operación de su empresa, va relacionado con el dólar, lo que ha generado un hueco, indicó el empresario.
Precisó que no sólo se ven afectados ellos, pues las familias de los trabajadores también han tenido repercusiones, pues varios choferes han sido despedidos y en algunos casos, han sido reubicados en otros puntos.
