Pánuco, Ver.- Un alegre convivió familiar que se desarrollaba en la localidad de Chicayán, tuvo que ser terminado de forma forzosa, cuando dos personas del sexo masculino primos entre sí, que se encontraban consumiendo bebidas embriagantes en exceso, iniciaron una acalorada discusión que de las palabras y amenazas pasó a los golpes ante la mirada atónita de los ahí presentes.
Bernardo Guillén y Héctor Torres de 32 y 34 años respectivamente, residentes del poblado Chicayán, acudieron al festejo de cumpleaños de uno de sus tíos que se celebraba en el poblado ya mencionado.
Sin embargo, se dedicaron a consumir alcohol, lo que hizo que salieran a relucir algunos inconvenientes de forma repentina, iniciando una acalorada discusión, cuyas ofensas fueron subiendo de tono conforme pasaba el tiempo.
Sin embargo, llegó el momento en que uno de los rijosos se levantó de la mesa, abalanzándose a golpes en contra de su oponente, golpeándole en reiteradas ocasiones el rostro, hasta que lo hizo sangrar de la boca y la nariz.
A pesar que el resto de los ahí presentes intervinieron para detener la riña, Héctor Torres se llevó la peor parte, motivo por el que fue necesario que recibiera atención médica.