El arte huichol es uno de los más apreciados y admirados en el mundo por su complejo manejo del color sobre formas y símbolos por los cuales los dioses hablaron a los hombres durante el ritual del consumo del cactus sagrado del peyote (híkuri).
Cada pieza está basada en una experiencia con la carne de los dioses y es una ofrenda a ellos. Esta comunicación abre paso al Nierika que en huichol quiere decir «don de ver», y también es el nombre que le dan a sus obras que son la consumación de su experiencia psicodélica con sus deidades.
Conoce el significado de los símbolos del arte huichol (wixárika) a continuación
Ojo De Dios
Es un instrumento que da el «don de ver» el Nierika bajo protección. Estos muestran las cosas como son y sitúan en el aquí y ahora. También es una representación de los 5 rumbos cardinales de Wirikuta. Los que tienen un agujero en su centro son para «ver del otro lado».
Peyote
Cactus sin espinas que nace en el desierto sagrado de Wirikuta, a donde el pueblo wixárika realiza su peregrinación. Es el medio para comunicarse con sus deidades y acceder a las verdades universales como la fuente de la vida y a diferentes niveles de consciencia de la existencia.
Venado
En el arte huichol el híkuri (peyote) nació cuando Tamatsi «Nuestro Hermano Mayor» accedió al Nierika, siendo el primero en llegar al oriente. Después de esto, su corazón (iyari) se transformó en el cactus sagrado y así repartió «el don de ver» entre los primeros cazadores.
Tras sus huellas, fueron naciendo los demás peyotes, asimismo el autosacrificio del venado hizo que se siguieran reproduciendo por este desierto semidesértico al norte de México.
A los iniciados también se les considera venados y se les llama Tamatsime.
El hombre venado
En las obras wixárika algunas figuras humanas pueden portar atributos del animal sagrado en sus cabezas o en otras partes del cuerpo, como cornamenta awa o bien, una cola maxakwaxi; (maxa: venado y kwaxi: cola) estos instrumentos sagrados, son un instrumento como la vara ceremonial (muwieri) que utilizan los maestros mara’akame.
Kauyumari, “el que no se ve” es el redentor de los wixáritari, quien por medio de sus experiencias en el Nierika les proporcionó a sus hermanos chamanes los conocimientos para obtener mejores condiciones para cultivar el maíz y les habló de acontecimientos importantes para la comunidad.
Vara
Como ya lo mencionamos arriba, la vara ceremonial muwieri es el instrumento con el que el chamán (mara’akame) realiza los rituales, en su punta suelen tener plumas de águila como la real o papagayo o aguililla de cola roja o bien colas de venado (maxakwaxi) y unas pequeñas campanas para acompañarse en los cantos sagrados.
Jícara
Para la cosmovisión wixárika la jícara llamada Xukuri también es un instrumento ritual muy importante que sirve como ofrenda y portadora de plegarias, sirve para depositar sangre de animales sacrificados para alimentar a los dioses; también pueden contener chaquiras para elaborar el arte huichol, figuritas de cera o monedas como mensajes dirigidas a sus deidades.
Además simbolizan el vientre femenino, como un depósito de vida donde se colocan semillas y agua, siendo una representación de cómo nació el mundo. En el ritual se les piensa como asiento de las deidades en los altares del centro ceremonial tukipa.
Cada una de estas tienen un encargado o jicarero que las protege y al mismos tiempo se convierte en representante de ese mismo ancestro.
Águila
Esta ave sagrada es considerada un puente de comunicación entre los hombres y los seres divinos.
Fuego
Nuestro Abuelo Tatewari es el primer chamán quien en su muwieri porta una cola de venado. Además es su principal deidad porque lo conciben como más viejo que el sol Tau.
Lagartija
Este animal es compañero y cuida al abuelo fuego Tatewari.
Lluvia
Tatei Matinieri es la diosa Madre de la lluvia de oriente, en su manantial se preparan para emprender la cacería del venado que los llevará hasta el peyote al llegar a Wirikuta, después de su peregrinación que incluye ayuno, sacrificios, austeridad y desvelo por varios días. Así los primerizos pueden alcanzar el Nierika.
La experiencia mística con el híkuri también es un medio para que los maestros chamanes llamados mara’akame.hagan predicciones sobre la lluvia soñando con las serpientes que traerán fertilidad a la tierra.
Serpiente
Las diosas madres de la lluvia son serpientes, animal divino que se ofrece como lluvia. En el arte huichol representa el mundo acuático del poniente, donde reina la oscuridad.En su cosmovisión del origen del mundo, una gran serpiente bicéfala habitaba en el mar que rodea la tierra cuando la oscuridad reinaba hasta que la estrella de la mañana flechó al gran monstruo marino y el Padre Sol Tau surgió victorioso en el oriente. Sin embargo al atardecer es nuevamente devorado por la serpiente al llegar al poniente y comienza a prevalecer la noche.
La temporada de secas se compara con la gran serpiente marina y la fertilidad de la temporada de lluvias (witarita). Asimismo, los iniciados sueñan con las serpientes de lluvia que se forman con la arena del desierto para luego transformarse en ellas y llevar a sus comunidades la serpiente de nubes (haikuterixi), de esta manera se da inicio a la temporada de lluvias y procurarles fertilidad.
Sol
El padre Sol llamado Tau, hace que su luz despliegue todos esos colores brillantes en diferentes formas y figuras que plasman en el arte huichol mediante el don de ver obtenido que han recibido por el peyote.
Flecha
Este objeto por el contrario representa a lo masculino y también es utilizado en los rituales, ya que con ella se sacrifica al venado y a los monstruos pertenecientes a la oscuridad que luchan con el sol.Es también ofrenda, portadora de dibujos con plegarias al momento de fechar a sus deidades, puede ser untada con sangre de animales sacrificados para alimentar a los dioses.
Marakame
A las flechas también se les ata un cuarzo (irikame) que es la representación de deidades que regresan al mundo y se convierten en personas-flecha para hacer llegar peticiones a las deidades, que les piden ser sacrificados en beneficio de la comunidad.
Pintura amarilla
Llamada Uxa al llegar a Wirikuta los peregrinos recolectan raíz de una planta que crece cerca de los manantiales sagrados de Tui Maye’u. Es su pulpa amarilla la que le da el color del reflejo del sol y las visiones del amanecer.
Con la raíz de Uxa los huicholes pintan e iluminan sus rostros con el color de TAU y decoran ofrendas con trazos geométricos como líneas, puntos y figuras de animales. También distingue a los iniciados.
