Nueva York, EUA.- Las empresas estadounidense Pfizer y alemana BioNTech anunciaron que aplicarán a algunos voluntarios una tercera dosis de su vacuna contra el COVID-19 para seguir explorando el efecto en las variantes del virus que han surgido los últimos meses.
A través de un comunicado, explicaron que el estudio se basará en participantes del análisis de fase 1 en los Estados Unidos, a quienes se les ofrecerá la oportunidad de recibir un refuerzo de la vacuna actual de 6 a 12 meses después de recibir su régimen inicial de dos dosis.
El director ejecutivo de Pfizer Albert Bourla reconoció que aún no existe evidencia de que las variantes que están circulando hagan perder efectividad al fármaco que desarrollaron, sin embargo, están previniendo que alguna de las cepas se vuelva más resistente.
Sobre el nuevo estudio de refuerzo, consideró que “es fundamental para comprender la seguridad de una tercera dosis y la inmunidad contra las cepas circulantes”, además de que la farmacéutica gestiona con los reguladores para lograr la autorización del refuerzo. en caso de ser necesario.
Por separado, el cofundador de BioNTech, Ugur Sahin, coincidió en el menester de alistarse ante una eventual adaptación rápida de las variantes hacia la vacuna y que estas puedan escaparse al biológico basado en ARNm que la empresa alemana ha diseñado.
“La flexibilidad de nuestra plataforma patentada de vacunas de ARNm nos permite desarrollar técnicamente vacunas de refuerzo en semanas, si es necesario. Esta vía reguladora ya está establecida para otras enfermedades infecciosas como la influenza”, comentó.
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