En duelo que cumplió con las expectativas, Chivas y América firmaron el empate 1-1 en el Clásico Nacional 150 de la fase regular en la Liga MX, en una noche donde los asistentes al Estadio Akron salieron más que satisfechos por lo visto en el terreno de juego, en especial en el primer tiempo.
A pesar de que había 10 puntos de diferencia entre ambos equipos, en la cancha los números pasaron a segundo término y los dos planteles tuvieron para ganar, pero al final se repartieron puntos. Las Águilas siguen invictas, aunque cedieron el liderato del Clausura 2018 a Santos, mientras que el Guadalajaradio una de sus mejores exhibiciones del torneo, pero se mantiene sin victoria en casa este semestre.
Teniendo como marco el cumpleaños 63 del dueño de Chivas, Jorge Vergara, su equipo salió a atacar al acérrimo rival, generó peligro y al minuto 21 ya ganaban el Clásico.
El canterano rojiblanco, José de Jesús Godínez -una de las sorpresas en la alineación de Matías Almeyda– sacó de la chistera el mejor gol del duelo, al anotar dentro del área con un potente disparo, justo después de que Eduardo López le bajó el balón con la cabeza en un trazo largo del zaguero, Oswaldo Alanís.
La anotación caló hondo en el seno azulcrema que empató al 23’ en una primera instancia, Cecilio Domínguez ya celebraba con sus compañeros, pero el abanderado anuló el gol por un muy apretado fuera de juego.
Quien marcó gol y no dejó dudas fue Oribe Peralta, quien al 25’ recibió un pase de Renato Ibarra, se dio la vuelta y ante la débil marca de Alanís venció a Rodolfo Cota para emparejar los cartones.
Antes del descanso, Eduardo López tuvo el 2-1 para Chivas, pero sacó un disparo chorreado y Jérémy Menéz respondió con un balón volado al 39’. Así terminó una primera parte trepidante, que no se sostuvo para el complemento.
Oribe quiso darle el triunfo al América y al 54’ estuvo cerca, pero bombeó de más su disparo ante la salida de Cota. Al 73’, Bruno Valdez voló un cabezazo en un tiro de esquina, que pudo ser el del triunfo para la visita.
Los minutos se consumieron y el Clásico Nacional quedó sin dueño, con las Águilas cediendo el liderato a Santos y el Rebaño en la antepenúltima posición de la Liga MX.
