ÁLAMO, VER.- A diferencia de hace más de una década, cuando en este rincón norveracruzano aún era posible escuchar el canto de los grillos y observar la luz de las luciérnagas bajo una noche estrellada, o de hace al menos veinte años, cuando después de la lluvia se podía escuchar el croar de los sapos y las ranas, actualmente hasta las abejas se están extinguiendo; alertan los hombres del campo.
“El cambio climático parece algo serio a lo que parece no terminamos de hacer caso a pesar de que, no solo los activistas políticos, sino también la ficción, llevan advirtiendo desde hace décadas”, citó hace un par de años el diario español El País, en un artículo alusivo a la literatura que predice el cambio climático: El nuevo género literario Clima-Ficción, mejor conocido como Cli-Fi.
Pero lejos de la fantasía de los novelistas, todo indica que los efectos de ese cambio climático ya comenzaron, ahora sí, a preocupar a los productores agrícolas y ganaderos de la región, pues la ausencia de insectos benéficos y de lluvias han empezado a permear la economía campesina.
EL CAMPO ALAMENSE, EN RIESGO
Tan es así, que hace poco más de una semana, la Federación de Agrónomos del Estado de Veracruz (FAEV) realizó aquí un foro de talleres sobre agricultura y cambio climático, a los que asistieron no solo productores de este municipio sino de varios más de toda la zona.
“La naturaleza nos está demostrando que el medio ambiente responde a las acciones del hombre, y que su deterioro repercute seriamente en el desarrollo actual y futuro de las naciones. El cambio en el patrón de lluvias, degradación del suelo, contaminación del aire y del agua, afecta seriamente los ecosistemas y la biodiversidad, provocando su destrucción.
“La solución requiere de la participación activa de los gobiernos, pero sobre todo de una sociedad bien informada y comprometida, que contribuya con sus acciones a generar un cambio en su relación con el medio ambiente”, sintetizó la ingeniera Delia Devezé Murillo, quien impartió la conferencia “Cambio climático y el nuevo extensionismo”.
Señaló que aun cuando no hay datos exactos, el cambio climático ha disminuido la producción en un 40 por ciento.
“Lo más importante es concientizar a la gente sobre la necesidad que tenemos todos de todos. Si somos agricultores necesitamos de los apicultores, por la polinización. Hay que tratar de integrarnos para que podamos certificar suelos orgánicos en más cantidad, porque, así como vamos, con el problema de la mosca de la fruta no tenemos muchos caminos, entonces, quizá voltear hacia lo orgánico sea nuestra oportunidad de seguir siendo productores de naranja”, advirtió.
GRIS PANORAMA PARA LA GANADERÍA
La misma situación les está quitando el sueño a los ganaderos. Recientemente, el ahora ex presidente de la Asociación Ganadera Local (AGL), Rubén Romero González, había externado su preocupación por la escasez de lluvias y la falta de pastos para los animales, algo que, con anterioridad, su ex asesor jurídico, Federico Rosales Vicencio, había atribuido al cambio climático.
“Yo creo que esta situación está desde noviembre, porque este invierno, estos fríos que han hecho… yo en lo personal opino que ha helado porque los zacates están quemados, y hay zacate que está grande, pero está seco completamente”, citó textualmente.
Y agregó: “De no llover, el problema podría empeorar, pero yo tengo fe, porque oigo que en otros municipios ya han caído dos o tres aguaceros y ya se ven reverdecer con la poquita o mínima agua que ha caído; se ven un poquito reverdeciendo los potreros, pero necesitamos que llueva un poquito más. Agua tenemos todavía en las presas, pero de seguir la sequía y que se planten más soles, esto va a estar…”.
SE ACABAN LAS ABEJAS
Por su lado, a mediados de este mes de marzo, el dirigente de la Asociación de Comunidades y Colonias de Álamo, Héctor Bustillos Montalvo, había destacado que la escasez de abejas en la zona podría afectar la polinización de las huertas citrícolas y por ende las próximas producciones de naranja.
Atribuyó a que por los intensos fríos de invierno o por el uso excesivo de insecticidas, las abejas polinizadoras están desapareciendo.
En este escenario, según un artículo publicado el 8 de abril de 2017 por la página web blastingnews.com, el Instituto Earth Wathch declaró aquel año a las abejas como la especie más valiosa del mundo en el último debate de la Sociedad Geográfica Real de Londres.
Subrayó: “…la realidad es que no debemos detenernos solamente en pensar en los beneficios que aportan para nuestra salud sino valorar su más extensa función en la cadena natural que es la polinización sin la que definitivamente la vida en el planeta sería imposible. La abeja es el único insecto que proporciona alimentos a los seres humanos”.
“La biodiversidad es el proceso de interacción entre los seres vivos y el planeta, la relación entre sí, y por supuesto, la respuesta biológica del medio ambiente hacia las especies.
“En este proceso, la abeja tiene una función vital, ya que la agricultura mundial depende en un 70% de estos insectos, dicho más claramente, 70 de cada 100 productos que usamos para alimentarnos dependen exclusivamente de las abejas. El equilibrio se explica por sí mismo: Sin la polinización las plantas no podrían reproducirse y sin plantas la fauna también desaparecería y, en consecuencia, los humanos”, puntualizó.
FENÓMENOS METEOROLÓGICOS
En este escenario apocalíptico, alertan autoridades: El estado de Veracruz es claro ejemplo del cambio climático registrado en el mundo. Las temperaturas extremas son apenas el mensaje de apertura que pide a los seres humanos concientizarse en el cuidado al medio ambiente, dijo en abril de 2014 el entonces meteorólogo y coordinador de Protección Civil en la zona conurbada Veracruz – Boca del Río, Isidro Cano Luna.
En cuestión del calor, explicó entonces en una entrevista publicada por el Universal Veracruz, es principalmente la zona norte y centro del estado, las regiones que sufrirán de aridez y sequías.
Un año después, el 21 de mayo, el sitio e.consulta.com, publicó declaraciones del entonces coordinador del centro de estudios y pronósticos meteorológicos de la Secretaría de Protección Civil de Veracruz, Saúl Miranda Alonso, que los fenómenos meteorológicos serán cada vez más fuertes por el cambio climático, lo que convertirá a Veracruz en una zona de riesgo.
Añadió también en aquel entonces
que “la zona norte de Veracruz es -por estadística- la más propensa a ser impactada por un huracán o ciclón”.
ESFUERZOS LOCALES
Por lo pronto, y como parte de los esfuerzos de las autoridades locales, en el marco del pasado Día Mundial del Agua, la Dirección del Medio Ambiente, en coordinación con la oficina operadora de la CAEV, pusieron en marcha el programa denominado “Gota a gota, el agua se agota”, el cual será difundido en escuelas de educación básica.
Francisco Benito Charnichart Hidalgo, director de la dependencia municipal, destacó que “En Álamo Temapache el agua escasea por diferentes situaciones: La contaminación y la deforestación, por lo que además el ayuntamiento tiene un programa de reforestación para cuidar los mantos acuíferos y ver que la gente y las industrias cuiden el líquido”.
Por Miguel Lorenzo del Ángel
