Castillo de Teayo, Ver.- Con la creación de jugos de naranja, galletas, pemoles, chancacudas, Gusanos típicos de la región, productores locales buscan la apertura de nuevos mercados locales, nacionales e incluso internacionales, esto con el fin obtener mayores ganancia a través de los frutos que se producen en la región.
Con el valor agregado, las personas no sólo tendrían la oportunidad de poder vender sus productos sin que se le echen a perder, así como poder tener microempresas que les permitan darle empleo a demás personas, principalmente a quienes viven en las comunidades donde se procesan los comestibles.
De acuerdo con Roberto Rocha Ríos, lo que se busca mediante este proyecto, no solo es producir una marca registrada en el municipio, sino también crear una identidad local, la cual les permitirá a todas las personas que deseen ingresar a este programa, que lo puedan hacer sin intermediarios y sin la burocracia, e incluso se buscara que todos tengan una certificación.
Con esta medida se podrían abrir fronteras, las cuales en los últimos años no le han permitido a los citricultores poder comercializarse en otros estados de la República, por lo que incluso ya se tiene algunas pláticas con cadenas comerciales así como tiendas locales, en donde se comenzarán a vender estos productos.
Rocha Ríos señalo que el equipo de trabajo es principalmente las personas del municipio, y quienes elaboran los diversos productos que se busca comercializar, por lo que las ganancias que se generen, serán para ellos mismos, por lo que el proyecto busca generar el auto empleo, principalmente en las personas que más lo necesitan
Explico que cada día más personas se están sumando a esta actividad, pues esperan que su comercio ya no dependa de otras zonas, como Álamo, Tihuatlán e incluso de municipios de Puebla como los Francisco Z. Mena.
